Para el diseño de los módulos y talleres, y la redacción de las actividades además del contenido técnico se identificaron seis motores que rigen el desarrollo del contenido que integra al plan de estudios y que en conjunto hacen al material único:
- La perspectiva de género.
- El aprendizaje por competencias.
- Una orientación pedagógica de los materiales.
- Evaluación basada en evidencias.
- El contexto de la Escuela de Código en PILARES.
- El crecimiento profesional de las participantes.
Como se especificó en el objetivo, este plan de estudios está orientado a las mujeres, no de forma exclusiva pero sí con la misión bien clara de atender y contrarrestar el rezago documentado que sufren las mujeres en el área comúnmente referida como STEM (del inglés science, technology, engineering and mathematics). Con esto en mente no sólo se incorporó la Perspectiva de Género, sino que se asumió el posicionamiento de poner al frente del material el quehacer de las mujeres. Con esto se identificaron las siguientes acciones:
- En todo el texto hace referencia a las personas participantes usando el género femenino, con la intención de facilitar la apropiación por las mujeres participantes del contenido y de ejemplificar a todos los participantes que una realidad alternativa a la que vivimos con respecto a las mujeres en STEM es posible. Ese posicionamiento se asumirá a partir de ahora en este documento.
- El material presenta escenarios que involucran temas de interés para las mujeres, estos escenarios se usan tanto para aterrizar el contenido técnico como para promover una discusión informada y abierta en los temas.
- Con el fin de promover el quehacer de las mujeres en el campo de las STEM los módulos y los talleres son en honor a una mujer o grupo de mujeres destacadas en cómputo a nivel nacional o internacional o en áreas afines a nuestro material como el feminismo o la pedagogía. El contenido incluye una síntesis de estas mujeres.
El plan de estudios sigue una metodología de aprendizaje por competencias donde cada módulo y taller define una competencia que se deberá ir desarrollando a través de la realización de las actividades. Esto contribuyó a que los textos estén orientados al hacer. De esta forma las actividades buscan que las participantes sean un agente de su propio aprendizaje a través de la investigación y reflexión, además de que se promueve que practiquen constantemente las habilidades técnicas correspondientes.
Adicionalmente a las competencias, cada actividad define un aprendizaje esperado que se enfoca a unidades de conocimiento técnico que la participante deberá apropiarse durante la realización de dicha actividad. Para fomentar esa apropiación, las actividades se dividen en partes que proponen diferentes quehaceres con una orientación pedagógica. Esta orientación culminó con material presentado de forma atractiva para las participantes, de forma novedosa promoviendo el juego, la interacción y la reflexión, de forma no tediosa y aterrizada en el contexto de la propia cultura en México. Un ejemplo de este esfuerzo son los títulos de las actividades y partes de actividad que buscan generar curiosidad rompiendo con el formalismo común en este tipo de documentos.
Como se mencionó en el plan de de estudios es muy importante el hacer, esto desemboca en que conforme la participante progresa en los talleres y el módulo se generan productos del aprendizaje que demuestran la apropiación de los conocimientos y de las habilidades. Estos productos son la base de la evaluación basada en evidencias. Cabe destacar que la generación de evidencias y productos ocurre en dos niveles. A nivel actividad, y de forma paralela, la acumulación de las evidencias por actividad contribuye a la generación de un producto/proyecto que es uno de los ejes que determina el nivel de la competencia alcanzado al finalizar cada taller y un módulo.
Es imposible pensar que el contexto de la Escuela de Código en PILARES, el lugar donde este material será implementado, no se vea reflejado en el contenido. En particular el material se enfoca en dos agentes principales: la participante y la tallerista. Por ejemplo, las actividades están dirigidas a la tallerista para indicarle cómo interactuar con la participante y cuáles son las responsabilidades que la participante deberá asumir durante la realización de una actividad. También en las actividades se promueve la interacción social con otras participantes, cuando esto sea posible, y algunas actividades y proyectos promueven la exploración de los espacios y estructura de los PILARES. Adicionalmente el contenido se pensó para que se desarrolle en las instalaciones de Escuela de Código, con horarios flexibles y asíncrona de tal forma que la participante tenga un amplio margen de organización con respecto al avance de las actividades y la tallerista tenga una guía que permita evaluar este avance.
Finalmente, el último motor que también influyó en la preparación del material es el crecimiento profesional esperado de la participante. En particular el material identifica actitudes que la participante deberá desarrollar para su crecimiento profesional, se le solicita a la tallerista registrar muestras de estas actitudes con el fin de retroalimentar a la participante al respecto. El material también asume un rol más activo en particular con la autonomía de aprendizaje ya que los talleres se redactaron con diferentes niveles de autonomía. En los talleres primeros los procesos de investigación son guiados, se especifica el cómo y el dónde buscar, en los talleres segundos se promueve que la participante comience a tomar decisiones sobre cómo buscar información y en los terceros talleres se promueve que la participante también decida dónde buscar. Así, al finalizar un módulo la participante debería haber alcanzado una autonomía mayor sobre su propia forma de aprender y asimilar nuevo conocimiento, ambas habilidades muy importantes en los campos STEM.